Gracias a un proyecto piloto impulsado por el Programa Fruticultura Sustentable de Valparaíso (PerfrutS), la asociación gremial ha comenzado un proceso de adaptación estratégica para hacer frente a los actuales desafíos del rubro agrícola.
La histórica Asociación de Agricultores de Quillota y Marga Marga ha retomado con fuerza su actividad con el fin de marcar un nuevo rumbo para el gremio agrícola local, a través de un proceso de adaptación estratégica centrado en tres pilares fundamentales: asociatividad, digitalización y sostenibilidad.
Y es que gracias al impulso de un proyecto piloto liderado por el Programa Transforma Fruticultura Sustentable de Valparaíso (PerfrutS) de Corfo, la agrupación busca articular y organizar a los productores de la zona en torno a una visión en común que responda y visibilice los grandes desafíos del rubro al día de hoy, como lo son la crisis hídrica y la seguridad en los predios agrícolas.
“La unión hace la fuerza. Creo que la asociatividad y la representatividad del agricultor, todo, cualquiera que sea, que le tenga el amor a la tierra y que tenga el amor a la producción agrícola, debe estar bajo el alero de la asociación. Ahí está la fuerza. Se pueden compartir los problemas y dar a conocer lo que vivimos día a día”, expresó Carolyn McLean, presidenta de la Asociación de Agricultores Quillota – Marga Marga.
McLean destacó además el valor de haberse incorporado al mundo digital: “Ha sido súper importante subirse al carro de la digitalización, de las redes sociales. Es necesario visibilizar a la asociación, el trabajo que hacen nuestros agricultores y los problemas que debemos enfrentar”.
Consultada sobre el propósito del proyecto piloto, que se espera implementar también en otras asociaciones gremiales, Marcela Carrillo, gerente del PerfrutS, indicó que “es sumamente importante la construcción de organizaciones que permitan conectar a nuestros agricultores, pues frente al desafío del cambio climático nadie debe quedar aislado. Es necesario que los productores estén representados, para así transmitir con celeridad las inquietudes y preocupaciones del mundo agrícola a las autoridades, la sociedad civil y la academia”.
La mirada de los productores
A propósito de los desafíos del agro actual, uno de los temas que mayor preocupación genera entre los agricultores de la zona es la escasez hídrica. Una problemática histórica que se ha agudizado con la crisis climática y que para Walter Riegel de Agrícola Las Cruzadas, requiere de un cambio cultural en torno a la importancia de la seguridad alimentaria.
“Sin duda la mayor dificultad de los agricultores es el tema del agua. Y la verdad es que es una batalla que lleva muchos años dándose en la quinta región. Hace falta que la gente tome conciencia de lo importante que es la agricultura. Estamos plenamente conscientes de que el consumo humano tiene la prioridad, y eso va a seguir siendo así, pero es un tema cultural, que la sociedad tome más conciencia sobre la seguridad alimentaria y visibilizar eso es súper importante”, sostuvo Riegel.
Al respecto, Diego Ortiz, vicepresidente de la asociación y representante de Agrícola Teruel, hizo un llamado a la comunidad y al propio gremio a ser más eficientes y responsables con el uso del agua y a avanzar en manejos agronómicos más sostenibles, subrayando que “lo más importante es que dejemos de competir entre nosotros y nos asociemos para ser más eficientes. Hoy en día todos quieren competir con todos y nadie quiere asociarse. Asociarse y juntarse para poder generar un vínculo y un fin mucho más grande, debe ser el objetivo y así hacer más eficientes todos los procesos”.
Otro de los ejes de preocupación es la seguridad. Según lo indicó Ignacio Allende de Agrícola Covadonga, “en los últimos cinco años han cambiado radicalmente los estándares de seguridad que existen y la cantidad de recursos que tenemos que gastar como agricultores para poder proteger nuestros cultivos y hacer de nuestra actividad algo rentable. Necesitamos que las autoridades nos ayuden. Creo que lo que estamos haciendo aquí en esta asociación desde el punto de vista gremial es un buen cauce para lograr unirnos. Es importante que los agricultores nos demos cuenta de la importancia de hacer fuerza común para lograr ser escuchados”.
Es por lo anteriormente señalado que la asociatividad juega un rol clave en el nuevo rumbo que emprende la Asociación de Agricultores de Quillota y Marga Marga. Un rumbo que para Cesar Nagel Cordua de Agrícola San José, evoca al origen de la agrupación: “La asociación gremial partió en La Cruz, el año 1960, por la necesidad, en ese momento, de agruparse y hacer parte de las peticiones de los obreros agrícolas. Y así partimos con la asociación gremial. Hoy en día juntar a la gente es muy complicado. ¿Y qué hace falta para lograr eso? Yo creo que falta dirigir y organizarnos”.
Este nuevo capítulo de la Asociación de Agricultores Quillota – Marga Marga busca recuperar el espíritu gremial de antaño, adaptándose a los desafíos del presente con herramientas modernas y un enfoque sostenible, a fin de seguir impulsando el agro y la seguridad alimentaria de la región.
Valparaíso, mayo de 2025