RTRS destacó el impacto de la acuicultura sostenible en la Conferencia de Skretting Chile
El 12 de agosto, la Mesa Global de Soja Responsable (RTRS) participó como Sponsor Bronce y orador destacado en la conferencia Feeding the Future: Sustainability & Innovation Conference 2025, organizada por Skretting Chile, división de Nutreco especializada en nutrición para acuicultura, en el Teatro del Lago, Frutillar.
El evento reunió a más de 200 líderes del sector acuícola, incluidos productores, autoridades y ONGs, para discutir los retos ambientales y sociales que enfrenta la acuicultura global.
En su charla “Soja Responsable: Transformando la Cadena desde el Origen”, Mariela Montoya, Gerente de Desarrollo de Mercados LATAM de RTRS, destacó cómo la soja certificada contribuye a la trazabilidad, producción responsable y transformación sostenible en la industria acuícola.
Los subproductos de la soja, como la lecitina, la harina de soja y el Concentrado Proteico de Soja (CPS), son ingredientes esenciales en la elaboración de alimentos balanceados para peces en la acuicultura. La utilización de soja certificada bajo el Estándar para la Producción de Soja Responsable RTRS, garantiza que estos productos cumplen con los 108 indicadores de sostenibilidad establecidos por la norma, fomentando prácticas responsables en toda la cadena de suministro y promoviendo un abastecimiento más consciente y sostenible en el sector acuícola.
“La certificación RTRS va más allá de la soja. Es un compromiso con el futuro de la industria, la biodiversidad y las comunidades. No se trata solo de vender un producto, se trata de crear soluciones para un sistema alimentario global más sostenible”, declaró Mariela Montoya.
RTRS refuerza su enfoque como proveedor de soluciones, estableciendo estándares competitivos y creíbles, y ofreciendo herramientas concretas que impulsan la producción, comercialización y adopción de soja sostenible. Entre ellas se destacan la Plataforma Online, que conecta actores y registra certificaciones, volúmenes y transacciones de créditos y material físico, y la Calculadora de Huella de Soja y Maíz, que permite a las empresas evaluar el impacto ambiental de sus productos.
Un panel con voces diversas
La sesión en la que participó Mariela fue moderada por Ramón Ulloa, reconocido periodista chileno de Canal 13, y reunió a referentes de distintas organizaciones:
- Paulette Derrouy (WWF Chile – World Wide Fund for Nature): Pesquerías en transición: experiencia de los Proyectos de Mejora Pesquera (FIP – Fishery Improvement Projects) de WWF
- Lea Rice (The Nature Conservancy): Salmon Feed sourcing criteria. Intersection of impact & feasibility
Compromiso y resultados concretos
Montoya destacó que RTRS no solo promueve la sostenibilidad en la soja, sino que también contribuye directamente al desarrollo de una acuicultura más responsable. “Nuestro trabajo tiene un impacto tangible: más de 54.500 productores certificados en 6 países (Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, India y Uganda) y un crecimiento continuo del 12% en la producción de soja certificada. Estos números representan el cambio real que estamos generando en el terreno”, enumeró.
Impacto de RTRS y su contribución a la acuicultura
RTRS tiene un papel clave en la sostenibilidad de la industria acuícola. Desde 2017, RTRS es reconocido por ASC (Aquaculture Stewardship Council) y BAP (Best Aquaculture Practices) como proveedor de soja responsable, cumpliendo con los más altos estándares en términos de criterios ambientales y sociales, y políticas contra la deforestación.
“Para RTRS, ser reconocidos por entidades como ASC y BAP no es solo un logro, es una prueba de que estamos alineados con los estándares globales más exigentes en sostenibilidad”, agregó Montoya.
Entre 2018 y 2024, el sector acuícola adquirió más de 2,5 millones de Créditos RTRS, reflejando el compromiso de la industria con prácticas sostenibles. En 2024, el 43% de los países en la base RTRS compraron material certificado para acuicultura, destacándose América Latina como una región clave para este mercado.
RTRS en números:
- 6.8 millones de toneladas de soja certificada en 2024 (+12% respecto a 2023). • Más de 54.500 productores certificados en 6 países.
- Más de 900.000 toneladas físicas comercializadas en 2024 (+125% respecto a 2023).
- Más de 220 miembros globales que representan a productores, OSC, industria, retail y comercio.
Acerca de RTRS
Fundada en 2006 en Zúrich, Suiza, la Mesa Redonda sobre Soja Responsable (RTRS, por sus siglas en inglés) es una organización internacional sin fines de lucro que promueve la producción, el comercio y el uso responsable de la soja a nivel global.
Como plataforma multisectorial, RTRS reúne a todos los actores de la cadena de valor de la soja, desde la producción hasta el consumo, para fomentar el diálogo, el intercambio de conocimiento y el desarrollo conjunto de soluciones orientadas a una producción ambientalmente adecuada, socialmente justa y económicamente viable.
Además de su rol como espacio de coordinación y construcción de consensos, RTRS ofrece soluciones prácticas de sustentabilidad a través del desarrollo e implementación de:
- Estándares de certificación para la producción responsable de soja y la cadena de custodia, diseñados con aportes técnicos especializados y auditados por entidades independientes, que garantizan la transparencia, la integridad y la credibilidad del sistema.
- Herramientas innovadoras, entre ellas:
o La Plataforma Online, herramienta digital global que conecta a los actores de la cadena de valor de la soja y permite registrar y rastrear certificaciones,
materiales certificados y volúmenes de producción.
o La Calculadora de Huella de Soja y Maíz, que permite estimar el contenido de soja y maíz en productos terminados, apoyando la evaluación de impactos y la toma de decisiones informadas a lo largo de la cadena.
Contexto histórico
RTRS surge en 2006 como respuesta a las crecientes preocupaciones globales por los impactos ambientales y sociales de la producción de soja. En ese mismo año, marcado por la firma de la Moratoria de la Soja en la Amazonia brasileña, se hizo evidente la necesidad de un mecanismo global y creíble que promoviera la producción responsable de soja.