- El acuerdo apunta a proteger los sistemas productivos campesinos, minimizando el impacto de los incendios que cada año amenazan la producción agrícola, el bienestar de las familias y el entorno natural.
Concepción, 04 de septiembre de 2025.- La región del Biobío ha sido una de las más golpeadas por incendios forestales en la última década, con pérdidas productivas y sociales para la agricultura familiar campesina. Ante esta realidad, el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP) y la Corporación Chilena de la Madera (CORMA) firmaron un convenio de colaboración regional que busca fortalecer las competencias de agricultores en torno a la gestión de riesgos y promover prácticas de manejo seguro en predios agrícolas.
La alianza se materializará durante los próximos meses con una serie de capacitaciones, charlas y talleres prácticos dirigidos a usuarios y equipos de extensión del Programa de Desarrollo Local (PRODESAL) y del Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI), iniciativas que en su conjunto suman cerca de 12.000 agricultores atendidos.
“El cambio climático y la experiencia de los últimos años hacen necesario que nuestros usuarios estén preparados para evitar emergencias que ponen en riesgo sus vidas y la producción regional de alimentos. Gracias a este convenio entregaremos herramientas simples, aplicables y efectivas, en línea con nuestra nueva Política de Gestión del Riesgo y Cambio Climático de INDAP”, expresó Fabiola Lara, directora regional de INDAP Biobío.
De acuerdo a estadísticas de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), durante la temporada 2022-2023 en la región del Biobío resultaron siniestradas 181.796 hectáreas. En ese contexto, el INDAP catastró cerca de 1.300 productores y productoras afectadas por incendios forestales, gran parte de ellos localizados en las comunas de Santa Juana, Tomé y Nacimiento.
Desde la asociación gremial maderera, el presidente de CORMA Biobío – Ñuble, Alejandro Casagrande, señaló que pondrán a disposición su experiencia y compromiso, y agregó que “los incendios forestales son una amenaza que no distingue entre grandes o pequeños predios. Este trabajo articulado con INDAP nos permitirá llegar al territorio, acompañar a los agricultores y sumar esfuerzos en una tarea que nos compete a todos: proteger al Biobío de los incendios”.
Este esfuerzo conjunto está en línea con las políticas del Ministerio de Agricultura que buscan potenciar la cooperación público-privada y desarrollar acciones efectivas frente al cambio climático y las emergencias rurales, contribuyendo a un progreso más seguro y sostenible para la agricultura familiar campesina.