Por primera vez, un dron agrícola con capacidad de carga de hasta 100 kilos y tecnología avanzada de navegación con ‘visión de cinco sentidos’ llega a Chile.
Esta tecnología permitirá a los agricultores de la zona central hacer frente a una de sus grandes dificultades: cosechar y trasladar cultivos de paltos y cítricos plantados en laderas, debido a su difícil acceso.
El modelo DJI Agras T100, que despegó oficialmente el pasado 15 de julio, marcando un antes y un después en el uso de vehículos aéreos no tripulados para la agricultura nacional.
Con una arquitectura multisensorial que combina LiDAR, radares de onda milimétrica y sensores de visión, el nuevo equipo opera con lo que sus desarrolladores denominan una ‘visión de cinco sentidos‘.
Esta innovación permite detectar obstáculos, personas, vehículos y cables en tiempo real, incluso en condiciones adversas como niebla o baja visibilidad.
Según el ingeniero ambiental Jorge Álamos, el modelo cuenta con un sistema de elevación inteligente, basado en un rotor coaxial dual, motores de alto torque de 155 mm y hélices de fibra de carbono de 62 pulgadas.
“Integra sensores triaxiales de peso y control de equilibrio automático, lo que permite vuelos precisos y seguros con cargas pesadas o en terrenos difíciles”, explicó.
Además, este dron puede realizar aplicaciones masivas de fertilizantes o semillas, alcanzando hasta 400 kilos por minuto y cubriendo un ancho de trabajo de 10 metros. También “memoriza los obstáculos detectados durante el primer vuelo, optimizando las rutas en operaciones futuras”, destaca el fundador de DJI Dronespray, empresa pionera en el mercado nacional.
Acerca del Drone DJI AGRAS T100
El DJI Agras T100 es un dron agrícola de última generación diseñado para operaciones agrícolas a gran escala, ofreciendo alta eficiencia y versatilidad para pulverización, siembra y elevación de carga. Fue lanzado globalmente en julio de 2025.
Características principales:
- Gran capacidad:
- Tanque de pulverización de 100 litros.
- Tanque de esparcimiento de gránulos de 150 litros.
- Capacidad de carga útil de hasta 100 kg para elevación (con sistema de doble batería).
- Rendimiento optimizado:
- Velocidad máxima de operación de 20 metros por segundo.
- Caudal de pulverización de 30 L/min (con 2 boquillas estándar) o 40 L/min (con 4 boquillas opcionales).
- Caudal de esparcimiento de hasta 400 kg/minuto.
- Ancho efectivo de pulverización de 5 a 13 metros y de esparcimiento de 3 a 10 metros.
- Seguridad y tecnología avanzada:
- Sistema de Seguridad 3.0: Incluye un sistema de visión de cinco direcciones, radar de ondas milimétricas omnidireccional y LiDAR para detección de obstáculos y seguimiento del terreno.
- Detección de obstáculos: Rango de medición de hasta 60 metros y velocidad de evitación de obstáculos de hasta 13.8 m/s.
- Navegación inteligente: Planificación de vuelo en tiempo real y optimización de rutas basada en inteligencia artificial para una aplicación más precisa y eficiente.
- Precisión de posicionamiento: RTK habilitado para una precisión de ±10 cm (horizontal y vertical).
- Diseño modular: Permite un cambio rápido entre modos de pulverización, esparcimiento y carga, lo que lo convierte en una herramienta multifuncional.
- Batería y carga rápida: Baterías inteligentes DB2160 de 41 Ah con hasta 1500 ciclos de carga y carga completa en tan solo 8-9 minutos con el cargador C12000.
- Diseño robusto: Hélices de fibra de carbono de 62 pulgadas y motores coaxiales de doble rotor para mayor potencia de elevación y estabilidad, incluso bajo cargas pesadas y condiciones de viento difíciles.
- Visibilidad mejorada: Iluminación de bajo haz y nuevos haces de luz delanteros y suplementarios hacia abajo para operaciones nocturnas más seguras.
El DJI Agras T100 está diseñado para redefinir la eficiencia y versatilidad en las operaciones agrícolas, adaptándose a diversos terrenos y tipos de cultivos, desde campos extensos hasta huertos y terrazas.
Chile, referente en innovación agrícola con IA
A nivel global, China, Japón y Estados Unidos lideran el desarrollo de la agricultura con drones, mientras que en América Latina, Chile se posiciona como pionero, sobre todo en cultivos de cerezas, cítricos y viñedos.
Este liderazgo se refleja en proyectos como el que desarrolla desde 2024 el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) en colaboración con la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), CENIA, y actores regionales del Maule y Ñuble. El objetivo es usar inteligencia artificial para analizar y controlar malezas en cultivos de arroz, trigo y leguminosas.
“Hoy es posible generar representaciones muy exactas de la distribución espacial de malezas”, asegura Lorenzo León, investigador de INIA Quilamapu. “Esto nos permite optimizar las estrategias de control y ahorrar herbicidas, generando un impacto económico y ambiental significativo”.