Con la llegada de las Fiestas Patrias, aumenta significativamente el consumo y traslado de carnes y vinos en todo el país. En este escenario, Indura –perteneciente al grupo Air Products– ha desarrollado y promovido diversas tecnologías que permiten extender la vida útil de los alimentos, manteniendo sus propiedades, frescura y calidad, además de contribuir a la seguridad alimentaria.
A diferencia de otras tecnologías, las soluciones de Indura se basan en el diseño de mezclas de gases específicas para cada alimento, lo que garantiza resultados precisos y adaptados a la naturaleza del producto.
Innovaciones en la conservación de carnes
Para enfrentar los desafíos de conservación y traslado de carnes en estas fechas, estamos comprometidos con entregar soluciones que se adapten a las necesidades específicas de cada cliente, contribuyendo a la eficiencia de la cadena productiva y garantizando productos de alta calidad para los consumidores”, señaló Gabriel Echeverría, ejecutivo desarrollo de negocio vitivinícola de Indura. Entre esas tecnologías destacan:
- Congelación criogénica con nitrógeno líquido (LIN): congela de manera ultrarrápida, evitando la formación de cristales de hielo grandes que afectan textura y sabor. Ideal para carnes premium, hamburguesas y filetes
- Atmósferas Modificadas (MAP): reemplazan el aire dentro del envase por mezclas de gases que reducen el crecimiento microbiano, mantienen el color rojo brillante de la carne y extienden su vida útil sin necesidad de congelar, favoreciendo la logística.
- Túneles y equipos de congelación criogénica: permiten procesos industriales de alta capacidad, con ahorro de energía y espacio, entregando mayor calidad en comparación con el frío mecánico.
¿Qué pasa con los vinos?
En el sector vitivinícola, la empresa entrega además un acompañamiento técnico integral, apoyando a los productores en todas las etapas de la vinificación, liderando con soluciones para mejorar la vinificación y conservación de los vinos:
- Enfriamiento superficial de uvas con CO₂: mejora la extracción de compuestos aromáticos y eleva la calidad de vinos de gama media y alta.
- Inertización de botellas con nitrógeno líquido: evita la oxidación, especialmente en vinos blancos con tapa rosca, y prolonga su conservación.
- Aplicación de gases inertes (CO₂ y N₂): protegen contra la oxidación durante el proceso productivo, optimizan fermentaciones y permiten elaborar vinos espumosos o gaseados.
“Queremos ser un socio estratégico de la industria alimentaria y vitivinícola, aportando innovación, sustentabilidad y seguridad en los procesos productivos”, agregó Echeverría.