Se estima que solo sobreviven 1500 ejemplares entre Chile y Argentina en poblaciones muy pequeñas y fragmentadas.
El hallazgo fue antecedido por el inusual avistamiento de un huemul macho en la costa de Cabo Froward, lo que motivó nuevas expediciones para investigar la presencia de una subpoblación en la zona.
Cabo Froward, Magallanes— En Cabo Froward, donde el continente americano se hunde en las frías aguas del Estrecho de Magallanes, Rewilding Chile ha confirmado la presencia de una subpoblación de huemules (Hippocamelus bisulcus) nunca antes documentada. Este hallazgo, en uno de los rincones más remotos y prístinos de la Patagonia, abre un nuevo capítulo en los esfuerzos por conservar a esta especie emblemática, hoy en peligro de extinción y de la cual sobrevive menos del 1% de su población original.La evidencia fue recopilada gracias a expediciones lideradas por Fundación Rewilding Chile y CONAF, que permitieron acceder y recorrer sectores de altísima complejidad geográfica dentro del área propuesta para el futuro Parque Nacional Cabo Froward.
El primer avistamiento ocurrió durante el sobrevuelo de aproximación: una hembra de huemul solitaria fue vista en el sector alto de uno de los cordones montañosos. En tierra, mientras el equipo desplegaba cámaras trampa, se divisaron a lo lejos dos huemules en una ladera protegida del viento.
Al día siguiente, tras un acercamiento más cuidadoso, se confirmó que se trataba de una hembra adulta y su cría de más de un año, ambas con un comportamiento sorprendentemente manso. Luego, se identificó otro grupo e individuos en un sector con características similares al anterior, lo que reforzó la hipótesis de que habían algunos grupos de una subpoblación de huemules establecida en la zona.
El momento más significativo ocurrió cuando el equipo observó un grupo de cinco huemules: un macho adulto dominante, dos machos jóvenes, una hembra adulta y su cría. Durante casi una hora, se registraron interacciones sociales y conductas propias de la especie, incluyendo juegos entre los jóvenes y respuestas jerárquicas del macho líder.
“Nos sentimos profundamente afortunados de relevar esta información y constatar que los animales se observan en muy buen estado. El aislamiento natural de la zona ha sido, sin duda, un factor clave para su conservación”, comentó Miguel Lopetegui, guardaparque de CONAF. “Estos encuentros refuerzan la urgencia de seguir monitoreando y protegiendo estos territorios”, enfatizó.
Durante las expediciones se instalaron grillas de cámaras trampas, permitiendo registrar también otras especies como el zorro culpeo (Lycalopex culpaeus), el puma (Puma concolor)y el huillín o nutria de río (Lontra provocax), especie en peligro de extinción, y más de 40 especies de aves .
“Estos hallazgos reafirman la necesidad de proyectar a Cabo Froward como un Parque Nacional que proteja el refugio más austral del huemul. La presencia de otras especies emblemáticas como el huillín y el puma refuerzan aún más la importancia de este territorio como un área clave para la conservación a gran escala”, señaló Cristián Saucedo, director de Vida Silvestre de Rewilding Chile.
El hallazgo no solo refuerza el valor ecológico del lugar, sino también la urgencia de protegerlo: se registraron signos de actividad humana no regulada, como tala ilegal y tránsito por senderos no habilitados, que amenazan la integridad de estos ecosistemas únicos.