André Laroze, CEO PEFC Chile
Cada vez que leemos un libro, no solo nos sumergimos en una historia, una idea o un conocimiento. También estamos conectando con un recurso natural que tiene una historia propia, muchas veces invisibilizada: la del bosque de donde proviene su papel. Hoy en día, el rol de cada industria en la construcción de un futuro sostenible es más importante que nunca; siendo imperativo que la industria editorial, tradicionalmente vista como promotora de cultura y conocimiento, participe de esta conversación.
En un contexto global de crisis climática y preocupación por la biodiversidad, la forma en que producimos y consumimos papel debe ser necesariamente sostenible. En especial en industrias como la editorial, donde el recurso forestal es la principal fuente de materia prima. Aspecto que sigue siendo muy positivo, dado que el impreso perdura en el tiempo reduciendo el consumo energético e hídrico comparado con las plataformas digitales. Por ello, la industria editorial debería promover activamente la sostenibilidad forestal del planeta utilizando solo papel que proviene de un bosque gestionado de forma sostenible y una cadena de suministro con trazabilidad de origen.
La certificación PEFC (Programa para el Reconocimiento de Certificación Forestal), de origen europeo, presente en Chile y en más de 50 países, asegura que la materia prima forestal proviene de bosques gestionados de manera sostenible, con responsabilidad ambiental y social, considerando los derechos de los trabajadores, las comunidades locales y el desarrollo económico local. Luego, a través de un procedimiento riguroso de seguimiento, llamado Cadena de Custodia, esta certificación garantiza la trazabilidad desde el bosque productivo hasta el libro impreso que llega a nuestras manos, verificando entre otros aspectos el abastecimiento legal de materia prima.
Consumir responsablemente no es solo tarea del lector final. Las editoriales, imprentas y distribuidoras tienen la capacidad y la responsabilidad de exigir materia prima de origen sostenible, elegir proveedores certificados y promover el uso de sellos como el de PEFC, que informa con respaldo fidedigno de sostenibilidad al consumidor. Es necesario entonces que estos actores, estén informados, asuman conciencia de producción y consumo responsables, y sean parte del compromiso con la deforestación cero.
El lector de hoy no solo pregunta qué se está diciendo, sino también cómo se produjo ese contenido. La sostenibilidad es parte de esa respuesta y PEFC es la solución, siendo el único sistema de certificación forestal que tiene explícito el requisito de deforestación cero, que es verificable mediante geolocalización.