Máximos históricos en herencias y microfincas dispararán las compraventas en el campo
Madrid, 27 de febrero de 2024.- El reciente Informe 2024 Cocampo sobre la Estructura del Suelo Rústico en España pone de manifiesto que se producirán cambios en el mercado de la tierra. La fragmentación del suelo rústico, evidenciada por la división de los terrenos en parcelas más pequeñas, es un fenómeno notable según los datos presentados en el documento.
El envejecimiento de la población en las zonas rurales derivado de las dificultades que enfrentan los jóvenes agricultores y ganaderos para adquirir fincas rústicas, con el 41,3% de los titulares de explotaciones agrarias mayores de 65 años, está incrementando las transmisiones de terrenos rústicos.
De acuerdo con las cifras de la Estadística de Transmisiones de Derechos de la Propiedad (ETDP) del Instituto Nacional de Estadística (INE), recogidas en el informe, en 2023, se produjeron 445.331 transmisiones de fincas rústicas, un 1% más que en 2022.
El aumento de las transmisiones se atribuye al elevado número de herencias, que registraron 181.765 fincas rústicas, un 2,3% más en comparación con el año anterior. Esta tendencia está propiciando la fragmentación del suelo, con la división de los terrenos en parcelas más reducidas. Las explotaciones de menor tamaño se han disparado desde 2009, experimentando un crecimiento del 59,0% aquellas con una superficie inferior a una hectárea.
El análisis revela que se prevé un aumento del 25,5% en la franja de edad de mayores de 65 años en la próxima década, siendo necesario el relevo generacional. Para abordar este desafío, se debe fomentar un equilibrio entre la herencia de tierras, el arrendamiento, que representa el 37,4% de la Superficie Agraria Útil (SAU) en España, y la propiedad, de forma que se facilite el acceso de nuevos agricultores y jóvenes emprendedores al sector.
El suelo rústico: una oportunidad de inversión
Pese a los desafíos sociales a los que se enfrenta la economía rural, el sector primario español ha ganado protagonismo en términos económicos en los últimos años. En 2023, la renta agraria creció un 11,1% en relación con 2022, alcanzando los 31.931 millones de euros, y la producción registró un valor récord de 65.081 millones de euros, un 3,3% más en comparación con el año anterior.
Aunque las transacciones de fincas rústicas disminuyeron un 5,9% con respecto a 2022, el incremento de su demanda ha propiciado una subida del 5,4% en comparación con el periodo previo a la pandemia de la COVID-19, hasta lograr un total de 148.621 adquisiciones en 2023.
El creciente interés en las fincas rústicas se ve impulsado por las oportunidades de inversión que estas presentan ante el reto de alimentar a una población en aumento, en un contexto de mayores dificultades por los efectos derivados del cambio climático, así como por el creciente enfoque en la sostenibilidad.
Este escenario ha fomentado oportunidades de inversión, con un incremento del atractivo por parte de los inversores institucionales, reflejado en el aumento de fondos especializados en tierra a nivel global, pasando de poco más de 70 en 2010 a más de 220 en 2023, según datos de la firma Valoral Advisors, incluidos en el informe de Cocampo.
España ha experimentado diversas olas de inversión centradas en diferentes cultivos, como olivos, almendros, cítricos, frutas de hueso, pistachos y aguacates. La creciente demanda de estas propiedades, sumada a la limitada disponibilidad de tierras agrícolas, han impulsado un aumento en su valor. En 2022, el precio medio de la tierra para uso agrario del país experimentó una subida de 83€/ha, con respecto a 2021, situándose en 10.263 €/ha.
Sin embargo, pese al creciente interés de los fondos, las grandes empresas y los family offices por la inversión en el suelo rústico nacional, las cifras muestran que la estructura de propiedad se mantiene sin experimentar alteraciones, con un 93,8% de los propietarios siendo personas físicas.
España es el segundo país de la UE en términos de Superficie Agraria Útil (SAU), con 23,9 millones de hectáreas, sólo por detrás de Francia, y dispone de cerca de 2,3 millones de hectáreas abandonadas y sin aprovechamiento. Dado el potencial del país, los autores del informe anticipan una revolución en la propiedad de los bosques, que serán los protagonistas del mercado de captura de CO2. Asimismo, prevén que la implantación de energías renovables sea una oportunidad para el uso de estas tierras y que se produzca una consolidación de la tierra.
Estas conclusiones serán presentadas en el evento que la plataforma para la compraventa y el arrendamiento de fincas rústicas realiza este martes 27 de febrero, y que se podrá seguir a través de LinkedIn y YouTube.
Sobre Cocampo
Cocampo es una startup que tiene el propósito de impulsar una economía agraria próspera y sostenible, facilitando el acceso a la tierra y la digitalización de los mercados rurales. Ofrece una plataforma de anuncios de compraventa y alquiler de fincas rústicas con más de 300 mil hectáreas a la venta, y una amplia variedad de opciones para compradores y vendedores, tanto en términos de características como de tipos de fincas rústicas, desde fincas de caza y recreo, hasta terrenos para explotaciones agrícolas y ganaderas.
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